Damasco, 04 jul (SANA) Siria lanzó ayer su nueva identidad visual, con el Águila Dorada Siria como nuevo emblema, tras su liberación de su forma anterior, para adquirir significados contemporáneos, invocando el pasado para simbolizar la restauración del Estado y mirando al futuro con diferentes conceptos que incorporan los cambios recientes.
El símbolo del Águila Dorada Siria: Pasado y presente
En la historia islámica, el águila fue un símbolo destacado en la conquista del Levante por el noble compañero del profeta Mahoma, Khalid ibn al-Walid. En la historia moderna de Siria, el “Águila Dorada Siria” fue una extensión de lo que los padres fundadores habían imaginado en 1945, encarnado por el diseñador y artista visual sirio Khaled al-Asali, como emblema de la República Árabe Siria.
Entre el águila antiguo y el nuevo… ¿Qué ha cambiado?
La revolución de 2011 representó el primer compromiso colectivo verdadero del pueblo sirio en la política en cinco décadas. Millones de mártires, desplazados, detenidos y heridos pagaron el precio durante catorce años. Se rompieron las ataduras que les impedían su libertad y soberanía política, así que era necesario redefinir la relación entre el Estado y el pueblo de una manera nueva, expresada por el presidente Ahmad al-Shara en sus palabras: «Un gobierno que emana del pueblo y le sirve».
El simbolismo de la liberación de las tres estrellas
El nuevo diseño puso fin a la fusión forzada entre el Estado y el pueblo y reorganizó su relación de acuerdo con las circunstancias presentes y las aspiraciones futuras. Las tres estrellas, que simbolizan la bandera en su forma y al pueblo en su esencia, fueron liberadas y se posicionaron sobre el águila, que simboliza al Estado, tras liberarlo de su carácter combativo, «el escudo».
Este pueblo, cuyas ambiciones abrazan las estrellas del cielo, está protegido por un Estado que lo defiende y le proporciona todo lo necesario para avanzar en su papel histórico tras décadas de abandono.
Unidad del territorio y unidad de la identidad siria
La cola del águila envuelve cinco plumas, cada una representa una de las principales regiones geográficas: norte, este, oeste, sur y centro. Este es el estandarte de la unidad siria en su forma más magnífica.
En cuanto a las alas del águila, no son ofensivas ni defensivas, sino más bien equilibradas:
• Cada ala consta de siete plumas, para un total de catorce plumas que representan todas las gobernaciones de Siria en conjunto.
• Esta división simbólica y simétrica enfatiza la importancia de cada gobernación siria y su papel en la estabilidad del estado.
• Por lo tanto, el nuevo emblema sirio se ha convertido en un pacto político visual, que vincula la unidad de la tierra con la unidad en la toma de decisiones.
Siria: Del Estado de Seguridad al Estado Guardián
Las preocupaciones del nuevo Estado se centran en la educación, la salud, la provisión de infraestructura y la legislación necesaria para un renacimiento económico basado en la energía latente del pueblo sirio. Esto consolida el concepto de un “Estado Guardián”, que protege al pueblo y le proporciona las condiciones para el renacimiento y la prosperidad, en contraste con el “Estado de Seguridad”, que reinaba en la opresión, la corrupción y la delincuencia bajo el régimen anterior.
Los cinco mensajes que transmite el nuevo emblema
1. Continuidad histórica: El águila no es una ruptura, sino una extensión del diseño de 1945, afirmando la autenticidad de la identidad siria a lo largo del tiempo.
2. Representación del nuevo Estado: El águila es la nueva Siria, un Estado moderno que surge de la voluntad de su pueblo.
3. Liberación y empoderamiento del pueblo: La liberación de las estrellas es la liberación del pueblo.
4. Integridad territorial de Siria: La cola de cinco plumas del águila representa las regiones geográficas, sin distinción ni exclusión entre ellas, sino integración.
5. Un nuevo pacto nacional que define la relación entre el Estado y el pueblo.
Esta labor se logró mediante auténticos esfuerzos sirios, vinculando la historia, el arte y el patrimonio cultural y civilizatorio que ha forjado la identidad y el carácter del pueblo sirio durante décadas.
La identidad visual se desarrolló para alinearse con las aspiraciones y los valores supremos de los sirios, que fueron la base de la bendita revolución siria y que los sirios han preservado hasta nuestros días.