Damasco, 1 jun (SANA) El Ministro de Emergencias y Gestión de Desastres, Raed al-Saleh, confirmó que Siria está experimentando un peligroso aumento en la tasa de incendios forestales y de matorrales.
El número de incendios ha alcanzado los 3 mil 579 en 12 gobernaciones desde principios de abril, lo que amenaza el futuro del equilibrio ecológico para las generaciones futuras.
En declaraciones a un corresponsal de SANA, al-Saleh reveló que Siria se ha enfrentado a una de las olas de incendios forestales y agrícolas más extendidas y peligrosas desde principios de abril hasta finales de junio.
Explicó que, tras el monitoreo y seguimiento, se determinó que los equipos de extinción de incendios de la Defensa Civil Siria respondieron a unos 794 incendios que se declararon en abril, mientras que respondieron a mil 252 incendios que se declararon en mayo y a mil 565 incendios en junio.
Según Al-Saleh, los equipos de Defensa Civil llevaron a cabo más de 16 200 misiones de intervención, utilizando 312 vehículos distribuidos en 116 estaciones de bomberos, como parte de un plan operativo que superó las 4600 horas de trabajo.
Esta fue una de las operaciones coordinadas de extinción de incendios más grandes que el país haya presenciado.
Los incendios se propagaron y reavivaron repetidamente, lo que provocó un aumento de las intervenciones.
La amenaza más grave es la proliferación de restos de guerra y municiones sin detonar, que explotan repentinamente durante las operaciones de extinción.
Estos restos representan una amenaza directa para los equipos de extinción de incendios y restringen el movimiento de los equipos, lo que requiere su retirada urgente como parte de una respuesta integral al incendio y para mejorar la seguridad de los equipos de emergencia.
Al-Saleh señaló que la alta presión y la propagación de los incendios causaron estrés humano y logístico debido al trabajo continuo durante días.
Esto se vio agravado por el deterioro del estado técnico de varios vehículos, la escasez de diésel y repuestos, la escasez de recursos y la dificultad para asegurar líneas de suministro regulares.