Damasco, 5 jun (SANA) La peregrinación a La Meca, conocida como Al-Hajj, es uno de los cinco pilares del Islam y un deber religioso que todo musulmán debe cumplir al menos una vez en la vida, siempre que tenga la capacidad física y económica para hacerlo. Este evento anual reúne a millones de musulmanes de todo el mundo en un viaje espiritual que no solo es un acto de devoción, sino también una manifestación de unidad y solidaridad entre los creyentes.
Los orígenes de Al-Hajj se remontan a la época del profeta Abraham (Ibrahim en árabe), quien, según la tradición islámica, fue el primero en establecer el culto a un solo Dios y en construir la Kaaba, la estructura cúbica que se encuentra en el centro de la Gran Mezquita de La Meca.
La Kaaba es considerada “la casa de Dios” y el punto hacia el cual todos los musulmanes dirigen sus oraciones diarias. La peregrinación se formalizó en el año 628 d.C. cuando el profeta Mahoma realizó su primer Hajj, estableciendo así los rituales que los musulmanes siguen hasta hoy.
Rituales del Hajj
El Hajj se lleva a cabo durante los días 8 al 12 del mes islámico de Dhu al-Hijjah. Durante este tiempo, los peregrinos participan en una serie de rituales que incluyen:
Tawaf: Los peregrinos circunvalan la Kaaba siete veces en sentido contrario a las agujas del reloj.
Sa’i: Se realiza un recorrido entre las colinas de Safa y Marwah, que simboliza la búsqueda de agua de Hagar, la esposa de Abraham, para su hijo Ismael.
Estancia en Arafat: El día más importante del Hajj, donde los peregrinos pasan el día en oración y reflexión en el Monte Arafat, recordando el último sermón de Mahoma.
Eid al-Adha: La celebración del sacrificio, que conmemora la disposición de Abraham a sacrificar a su hijo en obediencia a Dios.
Apedreamiento del demonio: Los peregrinos lanzan piedras a tres pilares que simbolizan a Satanás, como acto de rechazo al mal.
Estos rituales no solo son actos de adoración, sino que también representan la historia y las enseñanzas del Islam, uniendo a los musulmanes en una experiencia compartida de fe y devoción.
Este año, Al-Hajj se celebra del 4 al 8 de junio,(22.500 sirios participàn en los rituales de este año) y las autoridades han intensificado las medidas de seguridad y prevención ante el calor extremo, que puede superar los 50 grados Celsius.
Al-Hajj es más que una simple peregrinación; es un viaje espiritual que representa la fe, la unidad y la sumisión a Dios. A través de sus rituales, los musulmanes no solo buscan el perdón de sus pecados, sino que también se conectan con su historia y su comunidad global.
La experiencia del Hajj es única y transformadora, dejando una huella imborrable en la vida de quienes tienen la oportunidad de participar.